De vuelta a casa

Estoy apurando los últimos minutos en Lugo. En breve, pasarán a recogernos en el hotel e iniciaremos nuestro particular peregrinar a Compostela. (Lugo, por si no lo sabéis no tiene aeropuerto y está a una distancia de una hora y media más o menos del más próximo). Han sido tres días de risas y trabajos, de reencuentros con amigos y contactos profesionales. Pero también han sido tres días de comilonas y cenas pantagruélicas y sin ningún dojo donde practicar suburis! No sé si me entrará el Do!

La ciudad puede entrar perfectamente en una guía de poblaciones mágicas. Brumas matinales procedentes del río cubren la ciudad que repleta de iglesias, iglesuelas, capillas y capillitas y una catedral con San Frolán a la cabeza parecen formar una segunda muralla para proteger a sus habitantes de encantamientos de meigas. Y digo segunda muralla por que Lugo es de las pocas poblaciones que conserva prácticamente íntegra una muralla romana que es símbolo del pasado y elemento identitario en el presente.

Uno de los restaurantes más conocidos es El Verruga que a pesar del nombre poco atractivo es una delicia para el paladar por la calidad de sus productos. La cocina no es muy elaborada pero si abundante la comida y de calidad. Buen sitio para yantar y pasar el rato con los amigos. No voy a poner fotos de la estancia en este templo del gusto como haría kend-ito para no estimularos la salivación ;) Bueno, solo un ejemplo a mayor gloria de San Percebe Bendito
Nos vemos lechones





Fotos by CCB. Lugo 2010