Ayer realizamos un entrenamiento libre de katas. Al principio cada uno con la pareja que quería luego fuimos rotando de modo que practicamos con varios compañeros. A medida que va pasando el tiempo me estoy dando cuenta de lo realmente difíciles de hacer que son. No solo son los movimientos. Estos hace tiempo que todos los lechones los conocemos y realizamos las 7 katas de bokken y 3 de kodachi con bastante dignidad. Es el fijar la mirada en el otro y mantenerla a lo largo de todas las katas, la respiración pausada y coincidente con los movimientos, la armonía en los mismos, la sincronicidad entre uchi-dachi y sitachi, el espíritu... En fin un mundo que a medida que lo vamos explorando nos damos cuenta de lo inmenso que es.
Cuando empecé el blog pense que el apodo elegido, Kendopitecus, haciendo referencia al primer esbozo de humanidad en la evolución, iría progresando hacia Kendarnental, Kendomagnon y finalmente al acceder al Dan pasar a ser Kendo Sapiens. Sin embargo, la realidad me demuestra que a pesar de estar a las puertas de poder examinarme de primer Dan seguiré siendo Kendopitecus. Mucho es lo que todos los miembros de la Fraternidad del Lechón hemos progresado desde que empezamos a visitar el Dojo con camiseta, pantalón de chandal y un Shinai comprado en Han-Gok o Fuji, pero mayor aún es todo el camino que nos queda por recorrer, y uno se da cuenta a medida que va realizando el camino. Las katas son un buen ejemplo. Primero fue conocer los movimientos de las primeras, la tercera ya era un suplicio, luego aprender las restantes y realizar bien los movimientos de la séptima un éxito en la carrera del lechón. Pero una vez aprendida la mecánica uno se da cuenta que la kata es mucho más. Y eso te lo da el tiempo de práctica. Entender la complejidad real de lo que hacemos es el primer paso. Por eso, tal como decía Socrates, "Solo sé que no sé nada" y por eso mismo Kendopitecus será Kendopitecus durante muchos años si no por siempre.
Feliz año nuevo a toda la comunidad lechonera!
ResponderEliminarFeliz Año Seibei!
ResponderEliminarUn gran abrazo y los mejores deseos para el 2011