Ayer llegué tarde a la clase. Exceso de trabajo tras el viaje a México. Aún así era mi única posibilidad de entrenar y tuve de marchar pronto pues hoy estoy de nuevo en danza. Suerte que pude aprovechar toda la base y practicar un gi-geiko con el Sensei i otro con mi colega y amigo Cesc. Ahora tras correr por la terminal doméstica de Barajas me esperando vuelo en la terminal 4 para vuelos hacia sudamérica y paises no comunitarios (RSU) . Llegar ha sido una gimkana. Salimos tarde de Barcelona, llegamos a Barajas con demora, cambio de terminal, control de policia -me toca el único quisquilloso y me entretiene (en los controles aledaños al mío llego a contar que han pasado hasta 7 personas) me pide la tarjeta de embarque que luego ni la mira,... en fin un celoso cumplidor del protocolo. Pero Chile me espera así que corramos un estúpido velo. Por lo que sé en Punta Arenas no hay clubs de Kendo, así que no podré estrenar los nuevos Shinais que me ha traido Juan. Paciencia. Me conformaré con caminar por la Tierra del Fuego y si tengo ocasión bañarme en las proximidades del antártico (no sé si será muy prudente, pero de momento vamos con esa intención). Una nueva jornada transoceánica del Lechon Viajero de la cual rendirá cumplida cuenta a la que tenga ocasión..
No hay comentarios:
Publicar un comentario