Hoy hemos realizado una clase de aquellas que entre el calor y el esfuerzo se suda por litros. Calentamiento, base, mucha base, técnicas y para finalizar primero un gi-geiko libre, luego un eigin-geiko y cuando ya faltaba el aire un ipon-shobu libre. Y felices algunos ya se iban preparando para quitarse el men cuando el sensei nos regala con una serie de men-mem-kote-men-kote-men-kirikaeshi x 2. Creo que al acabar la clase mi keiko-gi pesaba un par de kilos más que antes de empezar.
El título del post hace referencia a la vergüenza que he pasado fruto de mi natural tendencia a realizar tropelias por la torpeza. Hoy entre los gi-geikos libres he estado con el sensei. Entro a men y él me responde con un debana men que me deja las neuronas tambaleando, veo su do libre y pienso..."ésta es la mía" y voy a Do resultado antes de alcanzar el Do le marco el tanto en el codo. Un Kodote de categoría que ha servido de ejemplo a la clase sobre lo que no se debe hacer. La verguenza ha caído sobre mí y mis antepasados. Suerte que luego lo he podido arreglar un poco con unas buenas entradas cuando me ha dejado :)
Un cerdo pintor , claro...
Hace 6 años
Ainsssss Perpetrator!!!!
ResponderEliminarNo se te pué dejá soloooo
encaixades
Pos si, un desastre total!
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